Proyecto constructivo y dirección de obra de la reurbanización de la avenida Pompeu Fabra que históricamente ha sido la travesía de conexión entre el ámbito urbano de la plaza de la Vila y el de la plaza de la parroquia de Santa María. Dos ámbitos que habían quedado disgregados por la aparición del ferrocarril, pero que con el reciente cubrimiento de este y el nuevo modelo de movilidad del municipio, se configura un nuevo escenario para el conjunto de espacios públicos centrales de Montmeló, que han permitido la reconversión de la antigua carretera en un espacio urbano de calidad, amable, seguro y confortable.
La directriz principal en la intervención en estos espacios ha sido la de crear nuevos espacios públicos manteniendo su referencia histórica, incorporando criterios de urbanización que favorezcan su apropiación como espacios peatonales y de estancia, de contemplación y de disfrute del paisaje y el verde urbano. En este sentido, se fijaron 3 objetivos básicos:
- Adaptar la urbanización de los espacios al nuevo modelo de movilidad propuesto. Se incorporan soluciones proyectuales en coherencia con el nuevo modelo de movilidad, minimizando el impacto del vehículo en el espacio público, ajustando y optimizando los espacios específicos de circulación y aparcamiento y limitando las velocidades para poder compatibilizar vehículos y personas.
- Reconectar los espacios de referencia histórica. Se crea un nuevo espacio urbano de calidad que conecta los dos espacios urbanos de referencia histórica de la Plaza de la Vila y la Plaza de Santa María, a la vez que dota a las dos plazas de la representatividad que requieren.
- Incorporar nuevos atributos que mejoren la habitabilidad de los espacios. Se crean nuevos espacios públicos donde el pavimento, la vegetación y el mobiliario, están pensados para generar ambientes seguros, accesibles y confortables. Se ha tenido especial cuidado en mantener y reforzar aquellos lugares donde las personas mayores se sientan a contemplar el movimiento urbano, los itinerarios de paseo que se han utilizado históricamente, las particularidades de los entornos de los equipamientos, etc., así como la creación de nuevos ambientes de estancia estrechamente vinculados con la vegetación tanto arbórea como arbustiva para crear confort y belleza, o la creación de espacios frescos y juego con el agua que han reformulado la imagen y el protagonismo de la plaza de la Vila.
